Barcelona a una masiva
marcha de protesta contra el descubrimiento de América. Convocada por diversas
asociaciones y colectivos de Latinoamérica y Cataluña dispuestas a boicotear las
celebraciones oficiales que pretenden ensalzar la figura del “heroico” pirata y
negrero al servicio de los Reyes Católicos.
Durante el recorrido hasta
el monumento de Colón los manifestantes corearon gritos contra el imperialismo
español, el colonialismo europeo y americano. Para la corona borbónica española
y el gobierno del PP, encabezado por
Mariano Rajoy, esta es una fecha trascendental para exaltar el ardor guerrero
del nacionalismo español. Porque es vital subirle la moral a los súbditos rememorando
las “gestas” y “hazañas” del pasado.
España continúa con su
política imperial en América Latina a través de las multinacionales, bancos,
industrias, firmas o empresas. Bajo la
excusa de la cooperación internacional y “humanitaria” se esconde el verdadero rostro del
capitalismo criminal y opresivo.
Varios manifestantes en
un acto de arrojo y rebeldía se encaramaron en el monumento al “almirante de la
mar océana” Cristóbal Colón violándolo; “fornicando” con las figuras alegóricas
de bronce y de mármol. Especialmente se entretuvieron en la de fraile que
empuña un crucifijo el cual besa
arrodillado un indígena en una vergonzosa actitud de entrega y sumisión. Símbolo
oprobioso de la dependencia y la dominación tanto material como espiritual a la
que hemos sido sometidos durante 517 años.
Finalizó el acto con la
petición de todos los participantes en la marcha para que la alcaldesa de
Barcelona, Ada Colau, escuche las demandas de la mayoría de ciudadanos que
exigen la inmediata demolición de este maléfico monumento. No podemos aceptar este tipo de afrentas e
injurias hacia los millones de descendientes de las víctimas que exigen
justicia y reparación por los crímenes cometidos en tan terrible
holocausto. Es indudable que se
necesitan gestos de buena voluntad para llegar lo más pronto posible a la reconciliación
y el dialogo fraterno entre nuestros pueblos.
Carlos de Urabá 2015.
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